Ya está aquí! ¡Al fin! Mi temporada favorita, en todo su esplendor. Cómo me gustan los días cálidos y largos y cómo me gusta que el tiempo nos acompaña para incorporar ahora si que si, más frutas, verduras y ensaladas frescas, ahora sin excusa, porque además nos apetecen un montón, ¿a que si?

Pues bien, hoy os dejo una ensalada que hice especialmente para Biospace, porque tienen unas bandejas con flores comestibles que son una oda a la alegría. Lástima que yo sólo puedo disfrutarlas en mis visitas a la ciudad de Barcelona… de hecho aquí en Menorca y con el cambio de casa lo primero que hice fue buscar un garden en la zona para comprar unas flores, quería plantarlas directamente en mi nuevo jardín (al fin un jardín!) – ¿sabéis cuántas veces he soñado poder salir desde mi casa, descalza y pisar tierra y césped y mirar al cielo y no ver edificios que me entorpezcan la vista? Aún no me puedo creer que mi sueño es al fin una realidad… cómo me ha cambiado la vida… sin lugar a dudas aquello que proyectamos y deseamos visceralmente se vuelve realidad, así que aprovecho el post para recordaros que nunca-nunca dejéis de perseguir vuestros sueños. Es más. Haced lo que sea necesario para acercaros a paso firme y decidido hacia ellos. Confiad en que siempre-siempre todo sale bien, incluso las malas noticias, vistas luego desde la distancia siempre nos traen algo bueno. Yo he aprendido mucho de eso en estos dos últimos años y os lo digo con el corazón abierto, porque esa es la verdad. Incluso de las peores noticias tenemos cosas muy buenas que aprender y son finalmente un regalo. Mi hermano con su muerte me hizo un gran regalo, mejor dicho dos, que nunca olvidaré. Recordad que tenemos una sóla vida aquí, en este plano de consciencia, al menos, y éste es nuestro mayor tesoro. De hecho podemos construir y deconstruir, avanzar y dar marcha atrás con las piezas del tablero de juego de nuestra vida tantas veces como deseemos hacer, sería una pena desperdiciar esta oportunidad crecimiento y aprendizaje y de tratar de ser plenamente felices viviendo las experiencias que deseamos tener y arrepentirnos llegado el día, cuando quizás sea demasiado tarde.

Creedme que yo también me enfrento a retos y a mis miedos a diario, pero en mi caminar he aprendido dos cosas:

Que cuando las cosas se hacen desde el amor y desde ¡la confianza todo aquello que necesitamos o deseamos para continuar avanzando, se nos da. ¿Porqué? Porque ni siquiera nos planteamos que lo necesitamos, simplemente lo pedimos desde el corazón, sin pensar en que una petición está teniendo lugar. Así que: os invito a ser muy amorosos en esta vida, a no prejuzgar a nadie, dar sin esperar recibir nada a cambio y confiar mucho mucho muchísimo en vosotros porque sencillamente: sois todos y todas absolutamente y mágicamente preciosos y perfectos tal y cómo sois.

Ya me fui. Muy típico en mi, perdón, haha. Regreso a la ensalada, que me falta la parte más interesante, al grano:

Debéis de saber que este inocente y ligero plato repleto de verde y color es un plato poderosísimo ¿y porqué? Pues por dos motivos:

Porque tiene germinados (conocidos por ser súper mini bombas concentradas de nutrientes de fácil asimilación) ¿Ya sabéis que la vitamina C se multiplica por 300% en los germinados de lenteja, por ejemplo? ¿O que comer un puñado de brotes de brócoli equivale a unos tres ramilletes? Qué, ¿no es una pasada?

Y porque en la salsa está su truco ya que he utilizado mis semillas favoritas para añadir en mis verdes días una buena dosis de omega 3 y de proteínas. Muchas veces me preguntáis a cerca de la proteína en una dieta vegana, pues bien. Las semillas de esta ensalada son una de mis fuentes de diario. Junto con la quinoa, el trigo sarraceno, el tempeh, algunas legumbres y por supuesto, las hojas verdes!

Va, ¡os dejo con la receta! para ver más explicaciones a cerca de la salsa poderosa, visita mi entrada en el blog de Biospace aquí.

ENSALADA DE FLORES & BROTES

· Cantidad: 2 personas
· Tiempo: 10 min
· Utensilios: personal blender o un bote con tapa

Ingredientes:

Mezclum de hojas variadas
Flores comestibles variadas
Hinojo
germinados de col lombarda o variados

Salsa:

1/3 T de semillas de cáñamo peladas
2 C de limón
1 c de jengibre fresco rallado
2 c de mostaza en grano
1 o 2 c de azúcar de coco
agua (la necesaria para diluir)
pizca de sal

Preparación:

1. Filetea fino el hinojo y mezcla con las hojas y los germinados. Sirve en un bol y decora con las flores.

2. Pon todos los ingredientes de la salsa en la mini blender (o similar) y tritura hasta obtener una salsa cremosa. Ajusta con agua hasta obtener una consistencia no muy espesa. Y si no tienes mini batidora pon los ingredientes de la salsa en un bote con tapa de rosca y algo más de líquido y agita hasta que se mezcle bien.